K Eau de Parfum continua la historia que encarnó Mariano Di Vaio con K Eau...
K Eau de Parfum continua la historia que encarnó Mariano Di Vaio con K Eau de Toilette, el aroma que cuenta la historia de vida de un hombre carismático, generoso y seductor creado por Dolce&Gabbana.
El hombre que elige su destino con pasión y confianza es el hombre K Dolce&Gabbana, el rey de su vida cotidiana. Inspirada en los paisajes terrosos y escarpados de la Toscana, la fragancia original ha sido reinterpretada para evocar el lado intenso y magnético.
Mientras que el Eau de Toilette se creó con una sutil mezcla de cítricos irresistibles, realzados por aromas potentes y amaderados, K by Dolce&Gabbana Eau de Parfum revela una intensidad especiada, un corazón más sensual y un fondo amaderado más pronunciado.
Equilibrando la fuerza con un corazón bondadoso, demuestra que nació no solo para llevar su corona, sino también para poseerla.
El Eau de Parfum de K by Dolce&Gabbana se abre con una vigorizante fusión de cítricos especiados protagonizado por la naranja sanguina y el limón italiano creando un estallido en la salida.
Junto con la frescura de cítricos realzada por un toque especiado de cardamomo, que aporta un toque enérgico al corazón de estafraganciaintensa y profunda.
El geranio, la salvia y la lavanda se vuelven más sensuales gracias a un acorde de leche de higo, que brinda un toque suave y cremoso a la fragancia, fundiéndose con el calor persistente de las especias.
Un fondo de madera compuesto por madera de cedro, pachulí y vetiver ilumina estafragancia, mientras que la esencia vibrante de la madera de Nagarmotha ahumada fortalece su rasgo seductor.
K Eau de Parfum mantiene la forma geométrica tallada del frasco con un tono más profundo de azul real, representando la intensidad de una fragancia potente y magnética.
El vidrio lacado ofrece una visión íntima del aroma que alberga. Coronado con su icónica corona del tapón está adornada en un tono plateado efecto bruñido, acentuando el azul noble de su cúpula y las piedras que la rodean. La letra K evoca el símbolo de la realeza combinado con una audaz simplicidad contemporánea.
Majestuosa y memorable, el frasco representa perfectamente el fascinante mundo de un rey moderno, el del día a día. #OWNYOURCROWN