Consejos para cuidar tus pies (Parte 1)

Cosmética

¡Por fin llega el buen tiempo, el calorcito, los días más largos! Nos apetece cambiar la ropa que hemos llevado durante el invierno, y también el calzado, liberamos nuestros pies de botas, zapatos cerrados con taconazos, zapatillas deportivas… y nos damos cuenta de que  posiblemente hemos tenido olvidados nuestros pies, que no los hemos tratado como al resto de nuestro cuerpo.

¡Todo tiene solución chicas! Ahora veremos unos sencillos pasos imprescindibles para poder lucir unos pies bonitos este verano, porque unos pies bien cuidados y con unas uñas arregladas nos ayudarán a poner en valor esas sandalias tan bonitas que nos hemos comprado.

Es muy, muy importante, no sólo por estética sino por salud, tener los pies en perfecto estado, ya que los talones agrietados, las callosidades y las uñas mal tratadas pueden afectar incluso a nuestra forma de caminar. No olvidemos chicas, que la salud empieza por los pies.

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Vamos allá con la rutina que os recomiendo para el tratamiento de vuestros pies:

Cada dos semanas una pedicura, ¿cómo la haremos? Es muy fácil, sólo necesitas diez minutos y verás como el aspecto de tus pies cambiará por completo.

1. Sumerge tus pies durante unos minutos en un recipiente con agua templada a la que habrás añadido un buen puñado de sal marina o una gotas de tu aceite esencial favorito (si el día te ha llevado hasta el extremo y estás que muerdes, cierra los ojos, ponte tu música preferida y alarga el baño de tus pies el tiempo que te apetezca, es de lo más relajante), de esta manera facilitas los siguientes pasos.

2. Una buena exfoliación de tus pies, no sólo las plantas sino los empeines y los deditos con una buena crema exfoliante, que puede ser la que utilizas para el cuerpo, yo suelo alternar la de Jeanne Piaubert Grain Fin con la de L’Oréal Exfotonic, las dos me van muy bien y huelen…

3. Una vez retirada la exfoliante, vamos a atacar las durezas y los callitos si los hay con los instrumentos adecuados para ello: limas para durezas, cepíllalos (éstos llevan una cuchilla y hay que ir con mucho cuidado), rascadores y mis preferidas, las limas electrónicas, que son súper efectivas y no agresivas, yo uso la de Scholl y… me encanta como deja mis pies, sobre todo los talones.

4. Ahora vamos a ocuparnos de las uñas, aplicando un tratamiento para las cutículas que las hidrate y ablande y así poder, con un palito de naranjo empujarlas y minimizarlas, no es recomendable cortarlas porque son una barrera protectora de la matriz de la uña.

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5. Después cortaremos y limaremos las uñas, en este paso evitaremos cortarlas muy redondeadas para que al crecer no lo hagan encarnándose en la piel de alrededor porque esto podría darnos muchos problemas.

Las herramientas más adecuadas para cortarnos las uñas son: las tijeritas de manicura (si las uñas no son muy gruesas), los cortaúñas, los alicates y también las limas ya sean de cristal, de esmeril… Podemos aprovechar ahora para pulirlas suavemente con una lima de cuatro caras, y quedarán lisas y brillantes.

La próxima semana os contaré la importancia de la hidratación para tus pies y los mejores colores de moda.

Si tenéis alguna duda, comentario o sugerencia por favor no dudéis en dejárnoslos, que nos encantan.

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